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27 de septiembre de 2015

"Maestro, hemos visto a uno que echaba demonios en tu nombre, y se lo hemos querido impedir, porque no es de los nuestros."

Domingo 26 del Tiempo Ordinario 
Evangelio: Marcos 9, 38-43. 45. 47-48

En aquel tiempo, dijo Juan a Jesús: "Maestro, hemos visto a uno que echaba demonios en tu nombre, y se lo hemos querido impedir, porque no es de los nuestros." Jesús respondió: "No se lo impidáis, porque uno que hace milagros en mi nombre no puede luego hablar mal de mí. El que no está contra nosotros está a favor nuestro. Y, además, el que os dé a beber un vaso de agua, porque seguís al Mesías, os aseguro que no se quedará sin recompensa. El que escandalice a uno de estos pequeñuelos que creen, más le valdría que le encajasen en el cuello una piedra de molino y lo echasen al mar. Si tu mano te hace caer, córtatela: más te vale entrar manco en la vida, que ir con las dos manos al infierno, al fuego que no se apaga. Y, si tu pie te hace caer, córtatelo: más te vale entrar cojo en la vida, que ser echado con los dos pies al infierno. Y, si tu ojo te hace caer, sácatelo: más te vale entrar tuerto en el reino de Dios, que ser echado con los dos ojos la infierno, donde el gusano no muere y el fuego no se apaga."
(Aciprensa.com)

Comentario: 
En estos domingos, Jesús que ya está próximo a su sacrificio redentor, da las últimas enseñanzas a sus discípulos. Hoy nos habla de los ¨celos¨. Del deseo de apropiarnos de Dios y/o de sus dones. Dios elige, a quien Ël quiere y no a quien se lo merece.  Hagamos lo que hagamos nunca seremos merecedores de ser elegidos. Es Ël que en su infinita bondad lo hace. 

Lo mismo hicieron los discípulos, al recibir el poder de Jesús para sanar y expulsar demonios que  lo creyeron ¨suyo¨,  y no querían que nadie más lo tenga. Ellos mismos, se crearon unos ¨derechos de propiedad¨.

Somos elegidos para ser sus hijos, para ser discípulos, ser padres, ser maestros, catequistas o misioneros. Pero siempre Ël es quien elije y lo hace con un cristiano, no cristiano, incluso con el pecador más empedernido como San Agustín o San Pablo. 

Esta es una gran tentación en la que todos caemos alguna vez y más cuando iniciamos nuestra vida cristiana. En la que somos muy sentimentales, y nuestras convicciones son débiles.  Vivimos por lo que sentimos de Dios y no por lo que creemos.

Es así que nos cuesta comprender y acoger al hermano. Lo juzgamos y fácilmente lo condenamos,  con gestos o palabras. Somos incoherentes, decimos que amamos y en verdad no lo hacemos.  Asi somos ¨escandalo¨ para otros, somos piedra de tropiezo para aquellos que quieren acercarse al Dios verdadero y no al que mostramos.  Gracias


Para Profundizar:


Comentario a Números 11: 25-29 Santiago 5: 1-6 Marcos 9: 38-43,45,47-48

Algunas cuestiones importantes en las lecturas de hoy. El Evangelio relata tres piezas separadas pero que de hecho, están estrechamente vinculadas entre sí y con la primera lectura.

Los discípulos no están del todo felices porque ven a un hombre echar fuera los malos espíritus - y no era un discípulo - . Son muy celosos obviamente. Ellos, reconocen que están en una posición bastante privilegiada al estar estrechamente asociados con Jesús y al haber recibido el privilegio de compartir los poderes de Jesús de la curación y la expulsión de los malos espíritus.

Ahora ven a un completo desconocido, alguien que no tiene nada que ver con su Maestro, haciendo lo mismo. Él puede incluso usar el nombre de Jesús para exorcizar. Ellos están indignados. Estan molestos. Incluso tratan de detener al hombre - de hacer algo bueno.

Pero Jesús les dice: "No se le debe parar:.. Nadie que haga milagro en mi nombre, es probable que hable mal de mí El que no está contra nosotros, está con nosotros" Es muy fácil para un grupo elegido convertirse en elitista, al reclamar para sí el monopolio de hacer el bien.

¿Dónde está Dios?
Nosotros los cristianos creemos que la Iglesia es la forma especial que tiene Dios de revelarse al mundo. Pero realmente no podemos seguir afirmando que, Dios sólo quiere ser encontrado en la Iglesia. Que en nuestra Iglesia solo está ahí la Verdad y la Bondad.

Dentro de la Iglesia, también, siempre ha habido grupos - y todavía entre nosotros - que sienten que tienen algo que nadie más tiene. Que sólo ellos están en posesión de la verdad de Dios, y que sólo entre sus filas puede estar la gente "salvada". A menudo gastan buena parte de sus energías tratando de demostrar que los otros grupos o incluso el resto de la Iglesia están profundamente equivocados.

Pero si así fuera el caso, entonces millones de personas quedarían excluidos de conocer o amar a Dios, o de hacer su voluntad. ¿Habría que pensar, por ejemplo, porque la mayoría de gente de Asia o África que no es cristiana, no tendría ninguna esperanza, pues todos serían personas malvadas y condenadas eternamente?

Al mezclarnos con los no cristianos en cualquier sociedad veríamos que Dios está haciendo su trabajo a través de todo tipo de personas y que muchos de ellos son muy buenas. Tal vez ellos crean en otra religión o no pertenezcan a alguna agrupación religiosa reconocida. Sin embargo, ellos creen en la importancia de la verdad, la justicia, el amor, la libertad, el servicio, la paz y la no violencia- de tal manera que pueda avergonzarnos a nosotros los católicos - .

La gente buena en todas partes
En cualquier gobierno que hay muchas personas buenas, dedicado y patentemente honestos que realmente sirven al público. Realmente son servidores públicos. Del mismo modo, hay médicos pendientes, abogados, profesores, hombres de negocios que están sinceramente "en busca de la excelencia" y tener una verdadera "pasión por la excelencia". Hay muchos en nuestra sociedad comprometida con la mejora de la calidad de vida.

Durante las muchas catástrofes - naturales y artificiales - que han golpeado nuestras propias y otras partes del mundo, nos encontramos con personas de religiones y de ninguna donación de grandes sumas de dinero.

Cada año en los eventos de recaudación de fondos, miles de personas vienen a ayudar a los servicios de bienestar social y de caridad dirigidas por la Iglesia Católica o por otros grupos religiosos, independientemente de sus propias religiones convicciones. "Si alguien te da un vaso de agua para beber sólo porque sois de Cristo, que con toda seguridad no perderá su recompensa." Estas personas a menudo dan a nosotros los cristianos - ya través de nosotros a los necesitados - mucho más que una taza de agua fría. Ciertamente Dios está presente y trabajando a través de todas esas personas. Y podemos estar seguros de que Dios va a llegar a ellos a su manera.

Lo que es de mayor importancia para nosotros es si los cristianos realmente estamos haciendo la obra de Dios. El hecho de que tenemos el nombre de cristianos es ninguna garantía de que somos.

Mantener a las personas lejos de Dios
El evangelio de hoy muestra un problema mucho más relevante para nosotros, los cristianos. Hay una severa advertencia contra los que impiden que otros se acerquen a Dios. Jesús lo considera como la forma más grave de pecado.

La palabra "escándalo" significa originalmente un obstáculo, como una gran piedra en el camino de una persona que hace tropezar y caer. ¿Soy una piedra de tropiezo para aquellos que podrían estar en busca de Jesús o de su Iglesia? ¿Por ejemplo, una persona no quiere ser cristiano por lo que me conoce? ¿Qué tipo de impresión de la vida cristiana o de la Iglesia doy? ¿Cómo me presento a los demás?

Acaso, ¿No hemos oído decir: "No me gustaría ser cristiano porque son como todo el mundo que conozco:. Chismean, dicen mentiras, engañan, están ávidos del dinero, toman venganza ..." Los no cristianos a menudo tienen ideas extrañas acerca de Dios, acerca de Jesús, de María, o de la Iglesia. ¿De dónde sacaron esas ideas? ¿Qué tipo de imagen de Jesús damos al presentamos como padres, maestros, empleadores o superiores, o como colegas de trabajo?

Donde hay amor, allí está Dios
Así que las lecturas de hoy son básicamente diciendo dos cosas:

Por un lado, tenemos que aprender a reconocer que Dios puede hacer su obra a través de todo tipo de personas. San Juan, en su primera carta, lo dice muy claramente: "Donde hay un amor que cuida ese es Dios." Los cristianos tienen claro que no hay monopolios para amar a los demás. Y podemos añadir que siempre que haya verdadera justicia, es de Dios; dondequiera que haya verdadera libertad para ser promovido o defendido, es de Dios; siempre que haya una persona, quizás un total desconocido de otra raza o cultura, que actúa como un hermano o hermana conmigo, es de Dios. Etcétera…

Por otro lado, como cristiano, a través de mi bautismo, me han llamado, es mi vocación, a ser para los demás otro Cristo. Lejos de ser celoso del bien que hacen los demás, tenemos que escuchar las palabras de Moisés: "Si sólo todo el pueblo de Yavhé fuese profeta, y el Señor dio su Espíritu a todos ellos."

Podemos tener una idea de dónde estamos si escuchamos con atención las palabras mordaces de Santiago en la segunda lectura. ¿Cuáles son nuestras actitudes hacia la riqueza y la pobreza? ¿Al lado del lugo o de la ingencia?

No sólo estoy llamado a ser una buena persona. Estoy llamado a extender la mano, para amar, para ser justo con los demás, para ser totalmente libre con y para los demás, para ser realmente hermano o hermana. Yo también estoy llamado a ser un profeta, a proclamar con palabras y acciones que la fuente de todo amor, la justicia, la libertad y la solidaridad con los demás es Dios quien ama, que perdona y que quiere que todos compartan una vida que se enriquece en todos los niveles.
 
La edición y el subrayado son nuestros 
Tomado de Living Space. Commentaries on the daily readings.


Que la Misericordia y la confianza en Dios no te falte

Gracias

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